lunes, 27 de julio de 2009

Cosas simples que no hago...

He descubierto que hay cosas que me gustan mucho, pero que pareciera no gustarme porque no las hago... por ejemplo:

Me gusta dormir pero me acuesto bien tarde... al día casi duermo unas 4 horas...
Me gusta sentir el frio de las sabanas pero por no destender la cama no lo hago...
Me gusta chatear con mis amigos... pero les he descuidado y casi no les hablo...
Me gusta ser una persona cumplida pero casi siempre llego tarde...
Me gusta mantener mi cuarto ordenado... pero desarreglo todo en 1 minuto...
Me gusta tener dinero, pero me gasto inmediatamente...
Me gusta hablar pero muchas veces me callo lo que siento...
Me gusta leer pero apenas empiezo... me da sueño y es el mejor somnífero que tengo...
Me gusta soñar, pero casi no lo logro... debido en parte, a lo mencionado anteriormente de que no duermo mucho... ahh pero sueño despierta...
Me gustaría enamorarme una vez más, pero tengo miedo...
Me gusta escribir, pero cada vez me gusta menos lo que escribo...
Me gusta no ser resentida pero es algo innato en mí...
Me gusta mi cordura, pero cada vez me sorprendo de mi locura...
Me gusta estar sola pero cada vez necesito más la compañía de alguien...
Me gusta escuchar música pero casi siempre me acompaña el silencio...
Me gusta mi sinceridad pero me engaño a mi misma...

domingo, 12 de julio de 2009

Esta vez sin lágrimas...

Este es una entrada personal, debería estar escrita en un diario o algo así, pero como no tengo un diario y no quiero mandarle en un mail al coprotagonista de esta historia... entonces lo escribiré aquí... además no me importa que el resto lea esta parte de mi vida, solo espero que esta sea la última vez que tenga que escribir sobre alguien de quien tenga recuerdos tristes, pero nuestra historia fue así...

Hace unos días te fuiste de aquí, y con ello comenzaste a salir de mi vida, a dejar de ser mi centro, a ser en quien pensaba todas las mañanas, a quien buscaba en las tardes y con quien me encontraba todas las noches...

Haciendo un recuento breve de como sucedieron las cosas, me remontare al día, en el que a pesar de que debí alejarme de ti, te pedí que vengas acá.. recuerdas la llamada en la madrugada para dedicarte la canción milagro de abril?... parte de la letra dice esto:

“Estarás esperando que un puñado de estrellas te vaya a buscar, o estarás atascada en el borde del cielo y no puedes saltar (...) Estarás confundido o no sabes la ruta que viene hasta aquí o será simplemente que no quieres venir. Que será que no llegas, este es mundo es ya duro y más duro sin ti, que será por que tardas por que pasan los años y no estas aquí (...) dale cura a este amor que no sabe morir (...)”

Recuerdo que como acostumbrabas desde esos días... no me dijiste nada y yo me sentí tonta al haber expresado lo que sentía... Pasaron unos días, estaba caminado de regreso a la casa (aun recuerdo exactamente en que lugar estaba) y me llego un mensaje a mi celu (aun lo guardo) que decía "Ya tengo boleto a Ecuador"... explicar que sentí??? nooo!!! no podría, solo recuerdo que de ahí tome un bus... y que cuando me baje ya me había pasado alguuuunas cuadras, que venía caminando a mi casa pensando en que pasara??? temblaba del simple hecho de imaginar que algún día podría abrazarte...

Los días pasaron, el día anterior a tu llegada, hacia muchas cosas, pero, dormir??? uuhhhh ahí mas que nunca me olvide que era eso... ese día temblaba, pensaba en que pasaría, imaginaba mil y un cosas sobre lo que sucedería... pero luego de esa noche interminable al fin llego el día, me fui a verte, temblaba, no pensaba, solo sentía... llegue, te vi, me viste, y solo dijiste hola.. tan malo te resulto verme como para no darme un abrazo después de casi un año de amarnos??? si bien en ese tiempo ya no teníamos nada, era necesario que te portes así??? tal vez fueron nervios, miedo a mi reacción, temor a que salga la parte mía que te odiaba por todo lo que pasó entre nosotros... pero como podría recordar eso si es que este día lo había esperado por más de un año y al fin llego...

Con el tiempo lograste mostrarte algo más afectivo... pero simplemente estabas buscando una manera menos cruel de decirme que estabas saliendo con otra persona e intentar así acabar con todas mis ilusiones... Te fuiste en menos de una semana… te llore (hasta doler) desde el instante en que partiste de mi lado, no sé cuantas horas, días, semanas… cuando pensé que la resignación estaba llegando a mí, llamabas de vez en cuanto como para que yo no me olvide cuanto me seguías doliendo…

Luego de tres semanas regresaste y las cosas fueron algo diferentes… viniste menos frio, no cariñoso, sino simplemente más dulce… pensé que las cosas habían mejorado… que tantas lagrimas valieron la pena para que te des cuenta que nadie te va a amar mas y de mejor manera que yo… mis sueños de días felices a tu lado volvieron a tener alguna esperanza de ser reales… pero simplemente fueron ilusiones mías porque para ti las cosas seguían iguales… con la diferencia de que ahora supuestamente eras un hombre mejor… digo supuestamente porque no note la diferencia…

De ahí en adelante el calvario que nos toco vivir fue en mayor parte mi culpa… yo hacía problema de todo, me ponía celosa de todo, me resentía de todo, reclamaba todo, tú me discutías todo, te quejabas de todo y no te gustaba nada de mi… llego hasta el límite en el que no solo me lastimabas con tus indirectas, sino también con frases duras, con palabras que no merecía… Hicimos muchos esfuerzos por mejorar las cosas, no sé cuantas veces intente no ser como soy para que me aceptes… creo que fue lo más estúpido que hice… porque encima de reprimirme, para ti nunca fue suficiente… prefiero no recordar la última vez que te llame feliz para decirte que había pasado una semana sin pelear y que espero que sigamos así… que quiero ser tu amiga… y al sentirte tan feliz por mi cambio decidiste confesarme algo que me hizo odiarte mas.. que me hizo pensar que eres la peor desgracia que me pudo haber pasado… pero aun así, te llore y fue el mayor sufrimiento por el que pase desde que te conocí… creo que ahí, al fin empecé a sentir que nuestro destino no era estar juntos… esas semanas me aleje de ti… claro que todos los días estabas en mi casa… que mientras menos quería verte más estabas a mi lado, que comenzaste a meterte tanto en mi vida que hasta me robaste el amor de mis hermanas… tal vez no lo hiciste intencionalmente… pero me arrebataste todo…

Llego el día de tu partida... nuestros días seguían siendo terribles, no podíamos ni ser amigos, tal vez jamás lo podremos, porque un amigo no hace tanto daño, no te hace sentir tan poca cosa… y si... tal vez tú te mereces alguien mucho mejor que yo… porque nuestras vidas son tan diferentes... tu amor es demasiado grande que nunca te conformarías con dármelo solo a mi... y yo soy tan egoísta que para quedarme con algo de tu amor preferí perderlo todo...

En alguna parte de mi corazón siempre habitaras...