jueves, 13 de mayo de 2010

Nuevo inicio

Hace unos meses quería escribir esta entrada destinada a expresar todo lo malo que alguien dejo en su paso por mi vida... había planeado en un post hacerle quedar mal a aquel que alguna vez me hizo tanto daño y estuvo a punto de terminar con el ambiente de confianza y tranquilidad que existe en mi familia... Mucho tiempo me sentí culpable de mi propia desgracia y de los que me rodean... recuerdo que incluso le dije a él que la siguiente entrada sería para contar todas sus mentiras, sus palabras repetidas 10000 veces no solo a mi sino a todas las que alguna vez caímos en su trampa...

Para hacer corto el cuento ya que el final obviamente no fue feliz, después de algunos meses de calma en los que mi corazón parece haber cicatrizado las heridas y haberse hecho resistente al dolor (lo demostró al enfrentar con valentía mas sufrimientos inesperados de personas que significaban demasiado para mí), el caso es que ahora vinieron a mí las ganas de escribir todo lo bueno que tengo en mi vida.

Como sabrán las personas que me conocen... tengo muchas cosas que agradecerle a la vida... pero hace algunos días hay alguien que se suma a esa lista, que es para quien va dedicado este post.

Nunca había sentido remordimiento alguno por tooooooooodas las cosas malas que he hecho, pero la llegada de él me ha hecho ver una realidad en la que puedo ser mejor, y en la que para estar tranquila conmigo misma quisiera regresar el tiempo y volver a hacer algunas cosas de mejor manera, y otras no hacerlas jamás... pero lastimosamente eso no se puede y yo tengo que convivir con mis remordimientos, que son los que ahora me dan fuerza para no cometer más errores.

El caso es que él es lo que necesitaba en el momento oportuno, es quien con solo estar un segundo es capaz de borrar de mi todo el dolor, la desconfianza, el miedo, el rencor, el resentimiento... como se logra eso? cuando paso? la respuesta es muy simple, creo que estoy creciendo, que él solo llego a mi vida para ayudarme a redescubrirme, a entender que nadie es imprescindible para ser feliz... que de los errores se aprenden, que la tristeza no es para siempre y que nunca es tarde para volver a empezar...

Ahora que llegaste a mi vida y espero estés leyendo esto, quiero que no me abandones, todavía no me siento lo suficientemente fuerte como para andar sola en este difícil camino, todavía necesito de tu mano porque a veces no tengo fuerza o peor aún, a veces pierdo el rumbo.

Sabias que tengo miedo? tengo miedo de no merecer nada de lo que me das... tengo miedo de que desaparezcas de manera inesperada así como llegaste, pero si eso sucede quiero que sepas que hoy soy más feliz!!!

Gracias por estar a mi lado, virtual pero realmente... gracias por ser mi (no se que palabra decir), por alegrarme con el solo mirarte sonreír, por mirarme tiernamente, por todo lo que inspiras en mi, por todos los sueños que ahora compartimos...

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